Las técnicas de visualización tienen como objetivo lograr la relajación mental de la persona y con ello la relajación global del organismo. Es útil para lograr el bienestar de la persona y para prevenir los síntomas de ansiedad.
Se emplea la imaginación para revivir o visualizar con todo detalle una escena o situación que tenga una relevancia positiva y significativa para esa persona. Puede ser un paisaje, una playa, o un momento feliz y significativo para quien realiza el ejercicio.
De esta forma, se visualizan con todo lujo de detalles los diferentes elementos que componen la escena positiva y gratificante que el paciente va a revivir. Podemos recrear todas las modalidades sensoriales para lograr una mayor riqueza de sensaciones y con ello tendrá más probabilidades de dejarse llevar por la visualización con un mayor realismo. Al experimentar las modalidades sensoriales de forma intensa y completa, también será más fácil generar las emociones positivas que están asociadas a este momento o lugar.
Por tanto al realizar este ejercicio es fundamental asociar emociones positivas de relajación, calma, felicidad, tranquilidad, paz o sosiego a medida que se van visualizando y recreando todos los elementos que caracterizan la escena.
La práctica diaria y continuada de esta técnica garantiza los beneficios de la relajación y cada vez resultará más sencillo incorporar esta técnica en la vida diaria del paciente, gestionando mejor sus emocione, afrontando de forma más positiva las dificultades y mejorando así su calidad de vida.