A partir del próximo sábado 26 de octubre, los españoles atrasaremos nuestro reloj una hora para comenzar con el horario de invierno. A las 3 de la madrugada serán las 2, y nuestro reloj biológico se verá afectado.
Con el horario de invierno ganamos una hora más de sueño, sin embargo el cambio en nuestra rutinas puede generar algunos efectos negativos, especialmente en personas con problema de sueño.
Te ofrecemos algunas claves que te ayudarán a adaptarte mejor al cambio de hora.
Sabemos que algunos síntomas que genera el cambio de hora en algunas son somnolencia e insomnio, lo que afecta a nuestra sensación de bienestar, y a la capacidad de trabajo físico y mental. Además podría producir posibles complicaciones orgánicas, como desórdenes del apetito y en la digestión sobre todo si ya existen otras dificultades, o en personas mayores y niños.
Seguir una simple rutina de acomodación puede ayudar a sobrellevar el nuevo horario de mejor manera, especialmente para los niños y las personas mayores. Debemos tener en cuenta que cualquier intervención en el ciclo natural de luz-oscuridad requiere una adaptación a los cambios en forma paulatina.
Claves para adaptarnos mejor al cambio de hora
- Asegure las condiciones para dormir. Trate de mantener una rutina de sueño normal, evitando las pantallas de televisión, ordenador y teléfono móvil mientras estamos en la cama.
- Trate de irse a la cama y levantarse siempre a la misma hora y los días previos al cambio vaya regulando los horarios poco a poco, adelantando 10 minutos al día la hora de sueño. Especialmente si existen problemas anteriores de sueño.
- Aproveche los beneficios de la luz natural. Exponerse a la luz solar durante los días previos y posteriores al cambio de horario ayudan a regular el ritmo biológico.
- Hacer ejercicio físico moderado, ayuda a adaptar el reloj interno, al aumentar la concentración de serotonina y de otros neurotransmisores en el cerebro.
- Modificar progresivamente el horario de comidas y evitar la ingesta de cafeína y alcohol los días previos y posteriores al cambio, especialmente en personas con dificultades para conciliar el sueño.
- Tomar melatonina: bajo la prescripción médica de algunas dosis de la hormona melatonina durante unos días podría ayudar a regular los ciclos de sueño y vigilia en las personas sensibles.